¿QUIÉNES SOMOS?

APANOT es una asociación sin ánimo de lucro que se dedica a la recogida, rehabilitación y reinserción de animales abandonados o maltratados, entre otras labores, en el municipio de Icod de los Vinos, Tenerife.

Llevamos más de 20 años desempeñando esta labor afincados en Llanito Perera. Un enclave natural con un paisaje privilegiado que nos permite disfrutar la de naturaleza en compañía de nuestros peludos

Nuestra asociación se compone íntegramente de gente voluntaria que dedica su tiempo libre, ilusión y esfuerzo para sacar a estos animales adelante. Colaborando de manera activa en este y otros proyectos de protección animal.

Contamos alrededor de 150 animales entre perros y gatos en nuestras instalaciones siendo un “Refugio Sacrificio Cero”. Ningún animal que entre en nuestras instalaciones será sacrificado bajo ningún concepto a no ser que, un veterinario o un etólogo lo determine por causas de fuerza mayor.



CONDICIONES DE ADOPCIÓN

Todos nuestros animales se dan en adopción de la siguiente forma:

- CONTRATO DE ADOPCIÓN: En él, te responsabilizas del animal, de todo tipo de cuidados y de que en caso de cualquier modificación te pondrás en contacto con el refugio.

- PAUTAS DE VACUNACIÓN Y DESPARASITACIÓN COMPLETAS.

- CHIP IDENTIFICATIVO OBLIGATORIO.

- ESTERILIZADOS. En caso de ser un animal de edad inferior, se firmará compromiso para la realización de la cirugía en una de las clínicas adheridas. (Incluido en cuota de adopción).

- SEGUIMIENTO DE ADOPCIÓN. El adoptante estará en contacto con el refugio para informar del estado del animal dando el consentimiento de este.

- DONATIVO. Cuantía de 100€ en concepto de costes veterinarios.

En caso de que el animal esté considerado PPP (Potencialmente Peligroso) por su raza o características físicas, deberá salir con Licencia Obligatoria y Seguro de Responsabilidad Civil a cargo del adoptante.

Previamente se debe rellenar un cuestionario de adopción para que el personal del refugio valore la adopción.


PRADI, ¡adoptada!

Transcurría el año 2010, y por el parque de Las Hoyas, cerca de La Casa de la Pradera, estaba ella...

Apenas era una cachorra aún, y ya tenía la pata izquierda delantera terriblemente inflamada debido a no sabemos muy bien qué... Una infección en el hueso, una enfermedad o tal vez consecuencia de un disparo, el caso es que PRADI se encontraba presa del pánico y en ese estado.

PRADI en la primera quedada podenca de 2011
Cogerla no fue tarea fácil, pero un joven deportista la vio, y no paró hasta rescatarla y tenerla a salvo con él. Tuvo que correr mucho tras ella para atraparla, pero finalmente PRADI se dejó salvar, y en sus brazos llegó a APANOT.

Siempre fue una podenquita discreta, tímida, misteriosa y nunca hizo mucho ruido, por eso PRADI, a pesar de tener una belleza podenca perfecta y demasiada nobleza, nunca llamó especialmente la atención de nadie... hasta que llegó su familia de acogida. Habían estado a su lado en la primera quedada podenca de 2011, y hacía tiempo que ellos ya le "habían echado el ojo", pero por una cosa o por otra, siempre aparecía un podenquito que lo necesitaba más. 

Pero pasaron los años, y de repente PRADI empezó a no encajar en ningún jaulón. En todos la intentaban atacar, y vivir en tensión y bajo el nerviosismo era su rutina, así que, tras tener ya demasiadas cicatrices, el 23 de diciembre de 2012 PRADI dejó atrás su estancia en APANOT, para empezar a formar parte de la que siempre supimos que sería la única familia temporal que podía hacer algo por ella...

Candelaria Quirantes y Gonzalo Blasco sabían que posiblemente la acogida de PRADI era la más complicada, pero ellos afrontaron el reto... y obraron el milagro.

PRADI con su papi
En marzo de 2013, y de nuevo a través de la genial intervención directa de nuestros compañeros de S.O.S. Peludos, PRADI conoció a Ventura, un señor de Santa Cruz que durante semanas, y cada día, subió a ganarse la confianza de nuestra podenquita miedosa. Con chuches, con pequeños paseos, con cuidadosos acercamientos o simplemente estando ahí, a su lado, todo valía la pena con tal de conseguir que PRADI confiara en él.

Y así fue... El sábado 30 de marzo de 2013 PRADI decía hasta luego a APANOT y a la familia Blasco Quirantes, para decirle hola a Ventura y empezar con él por fin una vida plena, tranquila y en paz.

Abandono, heridas, cicatrices, rejas y miedos, todo forma ahora parte de un pasado, de "La historia de PRADI" que se cierra hoy y para siempre, abriéndose un nuevo álbum en su vida, donde sólo cabe la felicidad y el calor de un hogar para siempre.

Todos sabíamos que era difícil, pero "lo imposible sólo tarda un poco más".

A SER FELIZ, y ahora, para siempre.

Siempre en nuestros corazones, María de las Praderas... 

Collage de despedida que creamos para los padrinos de todos los peludos ADOPTADOS

Empanada que sus papis de acogida elaboraron, para celebrar en APANOT la adopción de PRADI