¿QUIÉNES SOMOS?

APANOT es una asociación sin ánimo de lucro que se dedica a la recogida, rehabilitación y reinserción de animales abandonados o maltratados, entre otras labores, en el municipio de Icod de los Vinos, Tenerife.

Llevamos más de 20 años desempeñando esta labor afincados en Llanito Perera. Un enclave natural con un paisaje privilegiado que nos permite disfrutar la de naturaleza en compañía de nuestros peludos

Nuestra asociación se compone íntegramente de gente voluntaria que dedica su tiempo libre, ilusión y esfuerzo para sacar a estos animales adelante. Colaborando de manera activa en este y otros proyectos de protección animal.

Contamos alrededor de 150 animales entre perros y gatos en nuestras instalaciones siendo un “Refugio Sacrificio Cero”. Ningún animal que entre en nuestras instalaciones será sacrificado bajo ningún concepto a no ser que, un veterinario o un etólogo lo determine por causas de fuerza mayor.



CONDICIONES DE ADOPCIÓN

Todos nuestros animales se dan en adopción de la siguiente forma:

- CONTRATO DE ADOPCIÓN: En él, te responsabilizas del animal, de todo tipo de cuidados y de que en caso de cualquier modificación te pondrás en contacto con el refugio.

- PAUTAS DE VACUNACIÓN Y DESPARASITACIÓN COMPLETAS.

- CHIP IDENTIFICATIVO OBLIGATORIO.

- ESTERILIZADOS. En caso de ser un animal de edad inferior, se firmará compromiso para la realización de la cirugía en una de las clínicas adheridas. (Incluido en cuota de adopción).

- SEGUIMIENTO DE ADOPCIÓN. El adoptante estará en contacto con el refugio para informar del estado del animal dando el consentimiento de este.

- DONATIVO. Cuantía de 100€ en concepto de costes veterinarios.

En caso de que el animal esté considerado PPP (Potencialmente Peligroso) por su raza o características físicas, deberá salir con Licencia Obligatoria y Seguro de Responsabilidad Civil a cargo del adoptante.

Previamente se debe rellenar un cuestionario de adopción para que el personal del refugio valore la adopción.


Hasta luego RANCHO

"RANCHO". Amadrinado por
Teresa Sarmiento Eugenio y por Mónica Guillama.

Este 2014 empieza con mucha lluvia, sencillamente porque en el cielo no paran de llorar porque nos está resultando un poco duro dar el primer empujón. 

Tan sólo tres meses, menos de cien días para conseguirlo, tan sólo veinticinco domingos para enamorarnos de ti nos hicieron falta, pero en tan sólo unos días te perdimos. Desgraciadamente no conocemos tu historia más atrás de aquel 8 de septiembre, cuando te cruzaste delante del coche indicado para al menos no irte de este mundo solo. Nada más abrir la puerta y preguntarte irónicamente si estabas solo, ya estaba sentado como un apanotero más, deseando comerte el mundo desde el sillón de atrás mientras subíamos al refugio. Ya eras mayor, no te habían dado una vida digna y eso se notaba en tu cuerpecito y en tus ojos, lo más adorable de todo es que te daba igual, nos sonreías y movías el rabito como si fuéramos "lo más" para ti, como si nada hubieras pasado...

Nos llegaste muy hondo "Ranchito" (como todos te llamábamos), siempre a nuestros pies en cada paseo, en nuestro regazo desde que decidíamos sentarnos para disfrutar de una buena dosis de mimos, sin buscar problemas, tan sólo querías ser el centro de algo, un minuto, un instante... Se nos hacen muy duros los paseos sin ti, los mini PLY sin tu sonrisa perruna, cada imagen y tu carita siempre al fondo.

A veces antes de lo que queremos y algunos peor de lo que nos gustaría. En este caso tu salud se resintió y aunque quisimos hacer todo lo posible, te quedarías en este 2014, por suerte con un "hasta luego" con tu familia apanotera, por desgracia sin una familia definitiva de la que disfrutar algunos años más. Gracias RANCHO por permitirnos pasar unos momentos inolvidables contigo, por dedicarnos lo mejor de ti sin ningún tipo de rencor, porque algún día nos veremos, (¡prometido!) y como siempre con los bolsillos cargados de chucherías para nuestro paseos domingueros.

¡Hasta luego Ranchito!