Hasta siempre AMBI...
AMBI llegó a nuestro refugio junto a su hijo PUR en el mes de abril, de las manos del hijo de su dueña. Según él, tras el fallecimiento de su madre no era capaz de cuidar a los perros porque le recordaban a ella, pero viendo el estado en que llegaron supimos que venían de una larga vida de abandono: llenos de grelos y tumores, sin collares ni correas, oliendo a ambientador de coche para esconder el olor de tantos años de descuidos...
No queremos ocupar más espacio ya que sus madres de acogida han querido despedirla con sus propias palabras, pero si deseamos de todo corazón que estas letras lleguen a oídos de esa persona que los abandonó sin mirar atrás y vea todo el amor que recibió en el poco tiempo que estuvo entre nosotros.
Hasta siempre AMBI
"No importa el tiempo, si no la huella que dejas...
Apenas llevabas unos meses con
nosotros, llegaste al refugio el 26 de abril junto a Pur, tu hijo, se te veía
muy asustada, no comprendías porque tu familia después de tantos años te
abandonaban y dejaban con tantos
desconocidos, pero poco a poco y con el cariño de todos los que conforman la
gran familia Apanot te fuiste adaptando a la vida en el Refugio, poco tiempo después se te detecto varios
tumores pero una vez más saliste adelante y lo superaste y a partir de allí
comenzaste a disfrutar de los paseos de los domingos, las chuches, los abrazos
y el cariño de los voluntarios y en poco tiempo te ganaste en corazón de todos.
En Septiembre te fuiste de acogida junto a Pur a vivir a La Laguna, a nuestra casa,
queríamos para ti un hogar donde pudieras estar tranquila y se te diera los
cuidados que por tu edad necesitabas, y así comenzó tu aventura en tu nuevo hogar, allí tenías dos hermanitas perrunas que
en poco tiempo te cogieron cariño y no se separaban de tu lado, tenías tu propia camita aunque siempre
preferías compartirla con tu peque, a la hora de los paseos eras la primera en
llegar a la puerta y por supuesto en tener su collar puesto, para ti eran tus
momentos de alegría, más que andar corrías, no te gustaba quedarte detrás, así que siempre seguías el ritmo de tus
compis quienes en todo momento estaban pendiente de ti y esperaban si te
quedabas saludando a tus nuevos vecinos que también estaban encantado contigo.
Cuando llegabas a la plaza podías andar sin correa y recorrías todos los
rincones, pero siempre pendiente de no alejarte del grupo y de tus mamis.
Se te veía feliz, tu colita siempre estaba en movimiento, para comer te tomabas tu tiempo, pero comías
tranquila y despacio como a ti te gustaba hacerlo, y dormías junto a Pur y una de tus mamis de acogida, en
la noche cuando te levantabas para beber agua, te acercabas a ella para
asegurarte que estuviera allí y te susurraba un te quiero antes de
regresar a tu propia cama.
Pero esta felicidad duro poco
tiempo, te comenzaste a sentir mal y en tu
visita al veterinario te diagnosticaron un fallo renal, y aunque tenías
todos los cuidados que necesitabas
te fuiste apagando poco a poco, y
alejaste tu cabeza lejos de la comida y
tu mirada ya no era la misma, tu pequeño y cansado cuerpo no fue capaz de
aguantar más y el sábado 26 de septiembre nos dejaste, no te fuiste sola, estabas
arropada por tu familia. Todos te echaremos de menos mi niña, ahora lloramos
por tu partida, pero danos tiempo y volveremos a sonreír por ti, al recordar tanto momentos que nos distes, nunca te olvidaremos
porque los lazos de amor permanecen por siempre, hasta pronto peque y gracias
por dejarnos formar parte de tu familia, aunque estuviste con nosotras muy poco
tiempo has dejado una huella muy profunda.
Nos volveremos a encontrar mi
pequeña"