DRAGAN...¡¡Adoptado!!
Hay historias que merecen ser contadas una y otra vez.
Hay historias que se merecen grandes finales.
Y hoy te contamos el gran final de DRAGAN.
El papi de la familia del Drago; hoy no te vamos a contar esa historia porque él nos ha enseñado que es posible olvidar y, en su honor, hoy no es día para recordarla.
Hoy es el día de contarte como una abuelito llegó a nuestras vidas. Un perro que tenía todas las razones del mundo para no querer saber nada del ser humano, pero que decidió coger otro rumbo.
DRAGAN vino a enseñarnos que merece la pena perdonar. Que merece la pena confiar.
Fueron algunos días de ganarse su confianza pero, lo cierto es que nos lo puso bien fácil y la recompensa fue maravillosa. Muy pronto pudimos descubrir a un perrito dulce y con ganas de comerse la vida. Nos alegraba con sus paseos locos por el monte, él siempre a la altura de los más jóvenes.
Era inevitable, nos enamoramos.
Pero, como siempre pasa, hay flechazos inevitables, relaciones que ves como cuajan desde el principio y eso le pasó a los protagonistas de nuestra historia.
DRAGAN consiguió una fiel admiradora en una de nuestras voluntarias, quien aprovechaba cualquier momento para hacer la vida de nuestro abuelete más agradable.
Hace unos meses, nuestro peluchito empezó a enfermar y ellas lo tuvieron claro: DRAGAN se merecía más atenciones y cuidados.
Lo que empezó como una acogida acabó en el final que todos sabíamos que llegaría porque hay seres que están predestinados y tú, querido DRAGAN, has tenido la suerte de que el destino te lleve al mejor de los finales.
Hoy te podemos decir que DRAGAN ha sido felizmente adoptado.
Que tiene la suerte de conocer lo que es la vida en un hogar y que lo ha hecho en el mejor sitio que podía haber encontrado.
Hoy te deseamos que disfrutes cada segundo, como solo tú sabes hacerlo, de este bonito final que la vida te ha regalado.