MON CHERI ¡¡adoptada!!

Estos últimos fines de semana ya nos habíamos ganado su confianza y ella la nuestra, por lo que comenzó a disfrutar de paseos en libertad y así aprovechar estirando las patitas fuera del jaulón correteando con sus compañeros.
Su mirada es especial y era de esperar que enamorara pronto a alguien. Virginia y su hija Aitana han decidido darle una oportunidad en Santa Cruz y confiamos en que todo saldrá bien y pronto tendremos buenas noticias.
Recuerda pequeña chocolatina, ¡ahora toca ser feliz!.