¿QUIÉNES SOMOS?

APANOT es una asociación sin ánimo de lucro que se dedica a la recogida, rehabilitación y reinserción de animales abandonados o maltratados, entre otras labores, en el municipio de Icod de los Vinos, Tenerife.

Llevamos más de 20 años desempeñando esta labor afincados en Llanito Perera. Un enclave natural con un paisaje privilegiado que nos permite disfrutar la de naturaleza en compañía de nuestros peludos

Nuestra asociación se compone íntegramente de gente voluntaria que dedica su tiempo libre, ilusión y esfuerzo para sacar a estos animales adelante. Colaborando de manera activa en este y otros proyectos de protección animal.

Contamos alrededor de 150 animales entre perros y gatos en nuestras instalaciones siendo un “Refugio Sacrificio Cero”. Ningún animal que entre en nuestras instalaciones será sacrificado bajo ningún concepto a no ser que, un veterinario o un etólogo lo determine por causas de fuerza mayor.



CONDICIONES DE ADOPCIÓN

Todos nuestros animales se dan en adopción de la siguiente forma:

- CONTRATO DE ADOPCIÓN: En él, te responsabilizas del animal, de todo tipo de cuidados y de que en caso de cualquier modificación te pondrás en contacto con el refugio.

- PAUTAS DE VACUNACIÓN Y DESPARASITACIÓN COMPLETAS.

- CHIP IDENTIFICATIVO OBLIGATORIO.

- ESTERILIZADOS. En caso de ser un animal de edad inferior, se firmará compromiso para la realización de la cirugía en una de las clínicas adheridas. (Incluido en cuota de adopción).

- SEGUIMIENTO DE ADOPCIÓN. El adoptante estará en contacto con el refugio para informar del estado del animal dando el consentimiento de este.

- DONATIVO. Cuantía de 100€ en concepto de costes veterinarios.

En caso de que el animal esté considerado PPP (Potencialmente Peligroso) por su raza o características físicas, deberá salir con Licencia Obligatoria y Seguro de Responsabilidad Civil a cargo del adoptante.

Previamente se debe rellenar un cuestionario de adopción para que el personal del refugio valore la adopción.


HASTA SIEMPRE OTO...

"Te decimos hasta luego, porque a los seres a los que se ama nunca se les despide del todo..."

Después de 10 años de mala vida, Oto llegó a nuestro refugio en 2013 en muy mal estado tanto físico como anímico, nos preocupaban sus enfermedades pero sobre todo nos dolía verlo sin ganas de vivir.

Con el paso de las semanas Oto fue conociendo otra vida, estaba en un refugio pero rodeado del cariño y los mimos de Karmen, Nils y todos los voluntarios. Con el paso de los años se convirtió en uno de los abuelitos preferidos de todos por su simpatía, su cariño, sus trastadas... recordamos a muchos voluntarios cada domingo, rifándose el turno a ver quién podía sacarlo para darse un tranquilo paseo por el monte, que seguro siempre terminaba con una sesión de caricias y golosinas.

Siempre tuvo un estado de salud especial, pero como buen luchador que era aguantó sus achaques hasta los últimos meses de 2018 en los que empezó a empeorar. Nunca tendremos palabras de agradecimiento suficientes para la familia Blasco-Quirantes, que no lo pensó ni un segundo a la hora de llevarse a Oto a casa y adoptarlo para que tuviera algo más de tranquilidad en este momento que todos veíamos llegar.

Oto ha disfrutado de 3 meses de amor, cuidados y tranquilidad, pudo conocer la sensación de subir la salida del refu por última vez y tener una cama con su nombre, y cuando ya había completado su lista de "cosas por hacer" le hizo saber a su familia que estaba listo para irse, bien rodeado y acompañado hasta el final, como estuvo desde el primer día que llegó al refugio...
Oto ha sido el abuelo de todos, y ya será para siempre otra estrellita apanotera que brilla con fuerza en el cielo de Llanito Perera.